
El Gobierno Vasco ha permitido la reapertura de los entrenamientos escolares, aunque bajo restricciones. No se celebrarán partidos o pruebas de competición, y sólo habrá entrenamientos. En ellos podrán tomar parte un máximo de seis jugadores, siempre los mismos y no podrán hacer uso de los vestuarios.
Es un esquema conocido en el deporte de base, similar al que rige actualmente en las disciplinas federadas y que está dando buenos resultados.