
Virginia Díaz, remera del Raspas Arraun de Getxo, y Aina Cid volvieron a hacer visible en la Copa del Mundo Lucerna que componen uno de los botes más sólidos a nivel internacional (dos sin timonel), mostrando de nuevo sus credenciales de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio.
Al paso por los 1.500 se colocaron en cabeza y a partir de ahí no tuvieron rival, subieron el ritmo a las 39 paladas por minuto y volaron literalmente hasta alcanzar la medalla de oro, parando el crono en 7.17.93. Les siguieron Irlanda (+4.24) y Rumanía (+4.30) para completar el podio.