La competición que echó el cierre al calendario internacional, la Copa Mundial Final de tiro olímpico, que se reserva sólo a los campeones en título y a los mejores del ranking, deparó el mejor resultado para Kako Aramburu. Tras dos días de competición en la prueba de Skeet Olímpico 125, los 121 platos conseguidos llevaron a Aramburu a estar entre los seis mejores para tirar la fase final, compuesta de una semifinal de 16 platos a los que suman otros 16 para optar a las medallas.
En la semifinal, el tirador irundarra hizo una serie perfecta (16/16), y quedó a un plato de ventaja sobre los otros cinco finalistas, empatados todos a 15 platos. Los platos sucesivos, para deshacer el empate, fueron marcando los puestos desde abajo: primero, con el experimentado kuwaití Almaktoum, al segundo lanzamiento, seguido del joven Jansson, al 8º, mientras que el danés Hansen se mantuvo y quedó cuarto.
Aramburu pasó a las disputas de las medallas para decidir si se traía el oro o la plata. Y se hizo con el oro, el mejor remate para su temporada internacional.
