El patinador de velocidad Iñigo Vidondo consiguió batir dos récords de España en su primera gran competición, disputada en la localidad alemana de Inzell. Fueron los de los 500 metros y los 1.500 metros. El deportista alavés, dos veces medalla de bronce en los Campeonatos de Europa sobre ruedas, reconoció que llegaba a esta competición "con muy buenas sensaciones y con las piernas en óptimas condiciones. Estoy muy contento de los resultados, de poder rebajar mis marcas personales y batir dos récords nacionales, aunque todavía se siguen resistiendo los tiempos para las Copas del Mundo".
Vidondo, de 24 años y con tan sólo tres meses de entrenamiento sobre el hielo, debutaba con la prueba de 500 metros, en la que ya rebajó el récord de España en poder de Asier Peña (40.33) para dejarlo en 39.57. En la segunda competición del día, los 5.000 metros, el vitoriano aseguró que "comencé con la mentalidad de conseguir la mínima para la Copa del Mundo, pero a falta de cuatro vueltas para el final me empezaron a fallar las piernas por haber empezado demasiado fuerte". Aún así, pudo rebajar en siete segundos su mejor marca personal para dejarla en 7:02.91.
En la segunda jornada, Vidondo pulverizó su récord de España del día anterior de 500 metros, dejándolo en 39.32, e hizo lo propio con la prueba de 1.500 metros, también en poder de Asier Peña hasta la fecha, con 1:58.24, para marcar casi tres segundos menos que ese tope nacional con 1:55.51. Después de esta segunda jornada, el alavés afirmó que "es cierto que llevo poco realizando este deporte y me falta mucha técnica, pero en tan sólo tres meses estoy a tres segundos de la mínima de las Copas del Mundo en 1.500 metros y a un poco más de la del 5.000. Aún así veo que cada vez estoy más cerca y que mi clasificación es muy factible. Lo intentaré de nuevo los días 1 y 2 de marzo en Baselga di Pine, aunque será más complicado porque se trata de una pista descubierta".
